Como mejorar la energía vital de tu cuerpo por medio con cada uno de los elementos de la naturaleza.
La Medicina Holística y la sanación aborda la enfermedad en todos sus aspectos: físico, mental, emocional y espiritual. Los principales órganos humanos poseen la energía vibratoria de un elemento: el corazón, la del fuego; la tierra, la del páncreas, y los pulmones, el sistema nervioso la energía vital por el Éter. La energía vital circula recorriendo estos órganos en ciclos que marcan biorritmos diarios y estacionales; los desequilibrios o las enfermedades aparecen cuando se estanca o se altera su flujo.
• Toca La Tierra: Busca un momento para sentirla la tierra en tu piel, con tus manos o tus pies o acostándote en ella.
• Renuévate con el Agua: En un dia lluvioso aprovecha y disfruta con tu familia, sentir la lluvia recorrer tu cuerpo jugar con la energía maravillosa de este elemento. O si prefieres una buena ducha con música de fondo y aromas en tu baño.
• Recibe a diario baños de sol y de luna. El Sol Sobre la piel, acumula energía vital de reserva que luego va cediendo al organismo vivificándolo en todas sus funciones, el sol en la piel forma la vitamina D y aumenta la vitamina A. La luna tiene una energía poderosa que acompaña a numerosos procesos o cambios de nuestra existencia, marcando ciclos en la vida, en los aires, en las aguas y en la tierra.
• Respira conscientemente: Disfruta la sensación de llenar tus pulmones con aire, toma el aire lenta y profundamente, retenlo unos instantes y deja que salga despacio. Ralentizando la respiración también provocarás una disminución en la frecuencia cerebral, lo que te ayudará a relajarte.
• Practica el poner tu mente en blanco, bien sea con meditación o simplemente con un momento de calma trata de no pensar en nada si entran pensamientos en tu mente sácalos de la misma forma que llegaron y limítate a sentir cada parte de tu cuerpo.
• Crea rutinas de caminatas en la naturaleza, estar rodeado de la energía de un bosque es la mejor manera de renovar tu cuerpo recibes cantidades grandiosas de cada uno de los elementos.